La FDA da autorización de emergencia a la vacuna actualizada contra el COVID de Novavax, pero persisten las preocupaciones

La vacuna de Novavax contaminada con abortos, que se basa en un nuevo adyuvante nanoparticulado llamado Matrix-M, presenta problemas de seguridad y es en gran medida ineficaz.

(La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) otorgó la autorización de uso de emergencia (EUA, por sus siglas en inglés) para la vacuna actualizada contra el COVID-19 de Novavax en personas mayores de 12 años.

Aquellos que han recibido previamente una vacuna contra el COVID están aprobados para recibir una dosis, y los no vacunados pueden recibir dos, según la autorización. La FDA afirma que la vacuna actualizada «aborda las variantes que circulan actualmente».

La vacuna de Novavax se basa en un nuevo adyuvante de nanopartículas llamado Matrix-M, a diferencia de la base de ARNm de las inyecciones de Pfizer y Moderna, y cuenta con tecnología de nanopartículas basada en células de polilla y polisorbato 80.

Relativamente temprano en el lanzamiento de las vacunas contra el COVID-19, que se desarrollaron y revisaron en una fracción del tiempo que suelen tardar las vacunas bajo la iniciativa Operation Warp Speed del expresidente Donald Trump, algunos críticos de esas inyecciones expresaron un optimismo cauteloso sobre el potencial de Novavax como una alternativa más segura, más efectiva y más ética a las vacunas de Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson, que han funcionado mucho menos de lo prometido, se han relacionado con múltiples problemas de salud graves y presentan desafíos morales, dado el uso de células de bebés abortados en su desarrollo y/o pruebas.

Sin embargo, Novavax también es motivo de preocupación. El año pasado, un estudio global de más de 39,000 receptoras de varias vacunas contra el COVID, incluida Novavax, encontró que el 56% de las participantes femeninas experimentaron cambios en sus ciclos menstruales, y la Autoridad de Salud Pública de Suecia recomendó que las menores de 30 años no se pusieran la inyección debido a la preocupación de que, al igual que sus contrapartes de ARNm, podría causar un mayor riesgo de miocarditis. Y el constante desinterés del gobierno federal en investigar a fondo las preocupaciones con las vacunas anteriores, incluso mientras intenta exigirlas al público en general, plantea serias dudas sobre el rigor de su investigación de Novavax.

Además, según una descripción detallada de todas las vacunas candidatas realizada por el Instituto Charlotte Lozier provida, las células contaminadas con abortos no se utilizaron para crear las inyecciones de Novavax, sino que se utilizaron en algunas de sus pruebas de laboratorio.

El 11 de octubre, el cardiólogo y destacado crítico del establishment de COVID, el Dr. Peter McCullough, escribió que la eficacia de Novavax sigue siendo «inaceptablemente baja» a la luz de un estudio de 20.903 receptores que informó de su eficacia contra «las infecciones notificadas por SARS-CoV en personas con vacunación parcial… era del 23% … aumentando después de la vacunación completa al 31%», mientras que la efectividad contra la infección sintomática fue del 31% para la vacunación parcial y del 50% para los completamente vacunados.

«Si una vacuna no puede proporcionar de forma segura al menos un 50% de protección durante un año, no es viable en mi práctica clínica. Lamentablemente, Novavax fracasó en ambos resultados», escribió McCullough. «Con ómicron de bajo riesgo, y probablemente una inmunidad natural sustancial para el otoño de 2022, solo 26 infecciones condujeron a la hospitalización durante el período de estudio; 1 ocurrió durante el período de referencia, 7 durante la vacunación parcial y 18 después de la vacunación completa. No se reportaron muertes».

Por el contrario, más de 160 estudios han encontrado que la inmunidad natural de una infección previa por COVID es «igual o más robusta y superior a las vacunas existentes», según el Instituto Brownstone, una organización sin fines de lucro organizada en respuesta a las políticas de confinamiento por COVID establecidas.

Novavax ha recibido más de 90 millones de dólares de la Fundación Bill y Melinda Gates para el desarrollo de vacunas y recibió casi 400 millones de dólares de la Coalición para la Preparación e Innovación ante Epidemias, fundada por Gates, para desarrollar y fabricar su vacuna contra el COVID-19.  

En los últimos meses, algunas escuelas, hospitales y empresas han reanudado los mandatos de uso de mascarillas, citando el aumento de casos de nuevas variantes de COVID contra las que el gobierno admite que las vacunas actuales pueden ser ineficaces. La noticia ha provocado especulaciones sobre si se producirá un regreso a confinamientos más amplios.

El presidente Joe Biden ha anunciado que está buscando financiación del Congreso para desarrollar nuevas vacunas contra el COVID para estas variantes, lo que ha provocado temores de nuevos mandatos, un desarrollo igualmente apresurado y si tendrían problemas similares a los que se desarrollaron las inyecciones bajo su predecesor.

Fuente LifeSites