Irán despliega una armada en el Mar Rojo

El desarrollo se produce en medio de una operación liderada por Estados Unidos contra los militantes hutíes de Yemen, que han estado atacando barcos comerciales recientemente

El destructor iraní Alborz cruzó el estrecho de Bab-el-Mandeb y entró en el Mar Rojo el lunes, informaron las agencias de noticias estatales IRNA y Tasnim. El despliegue se produjo tras un encuentro mortal entre buques de guerra estadounidenses y militantes hutíes de Yemen en la vía fluvial el domingo.

El grupo chiíta afiliado a Irán ha controlado grandes franjas de Yemen, incluida la capital, Saná, y el puerto de Al-Hudaydah, desde que estalló un conflicto interno en 2014. En noviembre, los hutíes comenzaron a atacar barcos comerciales que pasaban por el Mar Rojo, que creen que son de propiedad israelí o que se dirigen a Israel. Los militantes afirman que actúan en solidaridad con Hamas en Gaza.

Según el informe de IRNA del lunes, el destructor Alborz fue desplegado en la vía fluvial clave, que representa alrededor del 12% de todo el comercio mundial, debido al «aumento de las tensiones».

El sábado por la noche y el domingo por la mañana, los destructores estadounidenses, el USS Eisenhower y el USS Gravely, respondieron a dos llamadas de socorro consecutivas del buque portacontenedores Maersk Hangzhou, con bandera de Singapur, que es propiedad y está operado por Dinamarca. En el segundo encuentro, varios helicópteros estadounidenses abrieron fuego contra cuatro pequeñas embarcaciones tripuladas por hutíes. Tres fueron destruidos como resultado, dijo el Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) en una publicación en X (anteriormente Twitter).

Un portavoz de los hutíes, Yahya Saree, confirmó el incidente y reveló que diez de los militantes del grupo habían muerto o desaparecido.

El Pentágono estimó que 23 barcos comerciales han sido atacados o incautados por los hutíes en el Mar Rojo desde el 19 de noviembre.

La Marina de los Estados Unidos, junto con buques de guerra de otras nueve naciones, han estado patrullando la vía fluvial clave desde el 19 de diciembre como parte de la Operación Guardian de la Prosperidad. Los hutíes han denunciado el despliegue como una «parte integral de la agresión contra el pueblo palestino, Gaza y la nación árabe e islámica».

Si bien Teherán ha negado las acusaciones de Washington sobre su participación en los ataques, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Hossein Amir-Abdollahian, señaló un supuesto doble rasero cuando habló con su homólogo británico, David Cameron, el domingo.

«No se puede permitir que Israel masacre a mujeres y niños y lleve a cabo un genocidio en Gaza e incendie la región, pero considere que detener un barco israelí en el Mar Rojo pone en peligro la seguridad de esta vía fluvial económica», insistió el diplomático iraní.

Fuente RT