Profesor de la Universidad Franciscana pide la renuncia del Papa Francisco tras el texto de las «bendiciones» homosexuales
Dirigiéndose al Papa Francisco, el Prof. Regis Martin instó: «Renuncien al cargo que se ha vuelto tan tortuoso de ocupar; luego vete al monasterio más cercano para una vida de oración y penitencia».
(Un profesor de teología de la Universidad Franciscana de Steubenville ha pedido la renuncia del Papa Francisco tras la publicación de Fiducia Supplicans, una declaración que ha creado controversia, confusión y escándalo dentro de la Iglesia Católica Romana.
Dirigiéndose al Papa Francisco, el profesor Regis Martin instó: «Renuncien al cargo que se ha vuelto tan tortuoso de ocupar; luego vete al monasterio más cercano para una vida de oración y penitencia».
«Hay cero probabilidades de que esto suceda, por cierto. Entonces, ¿por qué me molesto? ¿No es un poco como escupir al viento? ¿O tratando de cuadrar el círculo?», se preguntó Martin en su mordaz comentario publicado en la revista Crisis.
«Lo hago porque el Evangelio lo exige», respondió Martín, quien explicó:
Aunque no soy San Pablo, tampoco soy reacio a parafrasearlo. Quien, en su Carta a los Gálatas (2, 14), tuvo el descaro de llamar la atención del mismo San Pedro, el primer Papa, nada menos que en un punto de doctrina. Cuando un hombre no camina erguido, cuando no es recto, no hay duda de que alguien tiene que decírselo. Así se lo dijo Pablo a Pedro, reprendiéndole cara a cara en Antioquía. Y así, con el mayor respeto, hay que armarse de valor para decírselo al Papa.
Martin dijo que le diría al Papa «que está todo mojado. Que la declaración firmada y entregada por él es totalmente errónea».
Por mucho que el Papa Francisco desee extender el alcance de su cacareada «visión pastoral», nunca podrá abarcar la bendición del pecado. O el adulterio y la sodomía están mal, y los que se dedican a tales prácticas están cometiendo pecados graves y necesitan arrepentimiento; o no hay nada malo o malo en ninguno de los dos, y ningún sacerdote debe interponerse en el camino de aquellos que se presentan para que se bendigan sus uniones.
Ahí está la locura. Y la Iglesia, que siempre ha defendido la cordura, puede tener que pedirle al Papa que renuncie para que las cosas vuelvan a estar sanas.
El llamado del profesor Martin a «rodar cabezas» en el Vaticano, incluida la cabeza papal, se ha producido después de un tsunami de oposición de prelados, conferencias episcopales, sacerdotes y asociaciones de sacerdotes, y comentaristas católicos conservadores.
El 18 de diciembre, el Papa Francisco y el Cardenal Víctor Manuel Fernández emitieron Fiducia Supplicans que supuestamente permite «bendiciones para parejas en situaciones irregulares y para parejas del mismo sexo» en contradicción con la inmutable enseñanza católica de que la Iglesia no puede bendecir las relaciones pecaminosas.
El texto busca abrir la puerta oficialmente para que el clero católico brinde «bendiciones» a las parejas sodomíticas y adúlteras en oposición a la constante enseñanza católica y a las Sagradas Escrituras.
Fuente LifeSites
Descubre más desde PREVENCIA
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.