Ucrania cometió un «genocidio» en Donbass: Putin

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Los «adversarios geopolíticos» de Rusia habían tratado de «exterminar» a cualquiera que quisiera tener buenas relaciones con Moscú, dijo el presidente

Las acciones de Kiev en Donbass entre 2014 y 2022 fueron nada menos que un «genocidio», dijo el viernes el presidente ruso, Vladimir Putin. Las autoridades ucranianas posteriores al golpe de Estado de Maidán estaban decididas a deshacerse «físicamente» de cualquiera que siguiera apoyando el desarrollo de buenas relaciones con Moscú, añadió.

Rusia citó la necesidad de proteger a la población de Donbass de la continua persecución de Kiev como una de las principales razones por las que lanzó su operación militar en febrero de 2022. Tras el golpe de Estado de Maidán de 2014, dos antiguos territorios ucranianos con poblaciones predominantemente rusoparlantes declararon su independencia de Kiev y crearon las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk. El gobierno ucraniano posterior al golpe de Estado respondió lanzando una operación «antiterrorista» contra las dos repúblicas de Donbass, lo que desencadenó un prolongado conflicto que se ha prolongado desde entonces, de una forma u otra.

Inicialmente, Rusia trató de resolver el problema a través de los Acuerdos de Minsk, que luego se descarrilaron, que preveían un estatus autónomo especial para las dos repúblicas dentro de Ucrania. Moscú acusó repetidamente a Kiev de no implementar los términos de los acuerdos. En 2022, la excanciller alemana Angela Merkel admitió que los acuerdos negociados por Rusia, Alemania y Francia en 2015 no eran más que una estratagema estratégica destinada a ganar más tiempo para que Ucrania se preparara para un conflicto con Rusia.

«Todo lo que estaba pasando allí… fue un genocidio», dijo Putin el viernes, refiriéndose a los acontecimientos que se habían estado desarrollando en Donbass entre 2014 y 2022. «Esto no se puede llamar de otra manera», dijo, y agregó que la gente estaba siendo «exterminada». También señaló el hecho de que las fuerzas de Kiev continuaron luchando contra las milicias de Donbass después de que ya se habían firmado los Acuerdos de Minsk.

Según el presidente, los «adversarios geopolíticos de Rusia entendieron que no podían simplemente poner patas arriba a Ucrania con su población de habla rusa en el sureste». El golpe de Estado de 2014 abrió el camino para el «exterminio físico de cualquiera que estuviera dispuesto a desarrollar relaciones normales con Rusia», dijo Putin, y agregó que «había quedado claro que no se nos permitiría construir relaciones normales con nuestro vecino».

Ucrania se está convirtiendo en un estado «antirruso», dijo el presidente, y agregó que tales acontecimientos no habían dejado a Moscú otra opción para evitar el lanzamiento de su operación militar.

Putin se ha referido repetidamente a las políticas de Ucrania en Donbass como «genocidio». En junio de 2022, varios meses después del inicio del conflicto con Ucrania, dijo que «no puede haber otra definición para las acciones del régimen de Kiev que ‘un crimen contra la humanidad'».

En febrero de 2022, pocos días antes del inicio de la campaña rusa, el Comité de Investigación del país informó de que más de 2.600 civiles habían muerto en los últimos ocho años en medio del conflicto en Donbass. Más de 5.500 civiles resultaron heridos durante el mismo período, agregó.

Un informe de la ONU publicado en enero de 2022 situó en más de 14.000 el número total de muertes vinculadas al conflicto de Donbass en ese momento. Al menos 3.400 de ellos eran civiles, incluidos más de 150 niños, agregó.

Fuente RT


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