Las ONG respaldadas por Soros buscan el control global de la IA en pos de la agenda del Nuevo Orden Mundial

Una camarilla de multimillonarios globalistas no electos, liderados por Open Society Foundations y otros grupos respaldados por Soros, están buscando tomar el control permanente del sistema de información del futuro.

El 1 de noviembre de 2023, Open Society Foundations, junto con la vicepresidenta Kamala Harris, anunció una iniciativa en Washington, D.C. «para garantizar que la IA promueva el interés público».

A estos grupos respaldados por Soros se les unen otras nueve organizaciones no gubernamentales (ONG) que comparten una agenda globalista de despoblación al servicio del Nuevo Orden Mundial, y juntos «tienen 200 millones de dólares invertidos en el campo».

La medida marca un esfuerzo coordinado de las ONG «basadas en los derechos» para afirmar el control global sobre el futuro de los medios digitales. Utilizando el temor de un «ejército de robots asesinos» liderado por la IA, su verdadera intención es tomar el control permanente a través de la «regulación» de la información mundial basada en pantallas.

Apuntando al control de la IA

En un comunicado de prensa emitido por la Open Society Foundations (OSF), respaldada por Soros, diez ONG anuncian su objetivo, que es «financiar proyectos para garantizar que  

• La IA protege la democracia y los derechos y libertades de todas las personas;  
• que la innovación en IA es de interés público;  
• que la IA empodera a los trabajadores de todas las industrias; 
• que exista una mayor transparencia y rendición de cuentas en el desarrollo de la nueva IA; 
• y que construyamos normas y reglas internacionales sólidas en materia de IA».

Citando los peligros para la democracia y para la vida humana que presenta la inteligencia artificial no regulada, una camarilla de multimillonarios «caritativos» está buscando un gobierno no electo del sistema de información del futuro.

Como dijo Laleh Ispahani, directora ejecutiva de OSF en los EE.UU.:

Las herramientas de IA podrían beneficiar a personas de todo el mundo, pero a quién sirven dependerá de cómo se desarrollen, utilicen y supervisen.

Las decisiones que tomemos ahora marcarán el rumbo de las próximas décadas. Si queremos alcanzar nuestro potencial como comunidad y como país, debemos estar a la altura de este momento.

Entonces, ¿quiénes son las personas que decidirán cómo se utilizarán las poderosas herramientas de la IA?

Conoce a las ONG

Una ONG es una organización «benéfica» que busca poderes similares a los del Estado, pero actúa fuera del sistema electoral. Estas diez ONG globalistas que buscan el control de la inteligencia artificial financian directamente las causas políticas y sociales de la izquierda, con un fuerte énfasis en la despoblación y la «justicia social».

Esto se traduce en el patrocinio de grupos y proveedores a favor del aborto, campañas de quejas basadas en la raza y la promoción de la homosexualidad y la transexualidad. La mayoría de las campañas buscan cambiar las leyes nacionales a favor de estos grupos de quejas, un proceso habilitado por el amplio apoyo de medios de comunicación como The Huffington Post e incluso Wikipedia.

George Soros es un financiero cuya especulación monetaria le proporcionó una gran riqueza. Ha utilizado esta riqueza en causas «filantrópicas», principalmente a través de su Open Society Foundations, que comenzó en 1979 y, según el sitio web de OSF, ahora «financia grupos e individuos en más de 120 países».

Mientras que el liderazgo ha pasado ahora al hijo de Soros, Alex, Open Society Foundations continúa financiando causas abortistas, anti-familia y otras causas «progresistas». Estos organismos de Soros financian directamente a grupos procomunistas y de «derechos LGBT» y también patrocinan campañas de fronteras abiertas en la promoción de una «sociedad abierta».

Cuando el control es bueno para ti

Al igual que las otras ONG, Soros considera que su propio proyecto de control es benigno.

Imagina dos tipos de sociedad, con el ideal orientado en torno al culto al yo y los derechos que sus organizaciones buscan consagrar y defender: el «derecho» a matar a los niños no nacidos, a exhibir y difundir el extremismo sexual, y a promover políticas de identidad divisivas y la destrucción de las naciones al servicio de una utopía atea, es decir, la agenda del Nuevo Orden Mundial.

A esto lo llama la «sociedad abierta», que describe de la siguiente manera:

Me refiero a los dos sistemas de gobierno como sociedades abiertas y cerradas. Defino la diferencia entre ambos de la siguiente manera: en una sociedad abierta, el papel del Estado es defender la libertad del individuo; En una sociedad cerrada, el papel del individuo es servir a los intereses de los gobernantes.

Junto con las otras nueve ONG, Open Society Foundations es uno de los principales donantes de los medios de comunicación progresistas, que a su vez proporcionan una cobertura comprensiva de las actividades de estos grupos no elegidos. Son estos grupos los que se ven a sí mismos como los gobernantes legítimos de la «sociedad abierta» ideal.

Un interés compartido por la despoblación

A las Open Society Foundations se unen organizaciones similares que comparten una agenda anti-familia y de despoblación. Todas estas ONG se destacan por su apoyo a las causas de «centro-izquierda».

Una de ellas es la Red Omidyar. Fundada por los magnates del Área de la Bahía Pierre y Pam Omidyar, esta ONG promueve causas «progresistas» como la «teoría crítica de la raza» y financia grupos socialistas.

Su marca de «inversiones filantrópicas de impacto» ha sido señalada por Influence Watch como un modelo para iniciativas como la Iniciativa Zuckerberg del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, cuyas donaciones a causas de «centro-izquierda» incluyeron la donación de 3 millones de dólares a un grupo de campaña que buscaba abolir la policía en los EE. UU.

A la Red Omidyar se une el Fondo para la Democracia, del que también es propietario. La lista de ONG incluye a la Fundación Packard, que junto con la mayoría de las demás financia grupos de aborto y control de la población. La Fundación Ford es otra, que una vez patrocinó la esterilización forzada de mujeres en la India.

Esta última iniciativa es un intento colectivo de estas ONG de asegurar el control de la narrativa informativa global, de forma permanente.

¿Por qué estas ONG hacen esto?

¿Cuál es la razón detrás de este movimiento para tomar el control de la inteligencia artificial? El propio George Soros explicó por qué. En un ensayo escrito para su medio de comunicación Project Syndicate en junio de 2023, advirtió que el auge de la inteligencia artificial era uno de los tres peligros que conformaban la «policrisis» de nuestros tiempos. Los otros dos, según él, son el cambio climático y la invasión rusa de Ucrania.

Soros identifica correctamente que el vasto potencial de la inteligencia artificial presenta un nuevo desafío para la humanidad. Citó a Geoffrey Hinton, el llamado Padrino de la IA, quien advirtió sobre la creación de «robots asesinos» autónomos, diciendo también:

Hemos entrado en un territorio completamente desconocido. Somos capaces de construir máquinas que son más fuertes que nosotros, pero aún así tenemos el control. Pero, ¿y si desarrollamos máquinas que sean más inteligentes que nosotros?… La IA tardará entre cinco y 20 años en superar la inteligencia humana.

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Es este poder el que estas diez ONG buscan ejercer, para garantizar que sus propias agendas sean permanentemente inmunes a cualquier disrupción de la narrativa digital.

El poder de decidir lo que es bueno para ti

Está claro que la IA sin ningún control es un peligro para la humanidad. Sin embargo, este peligro es visto como una oportunidad por los «filántropos» de este mundo para nombrarse a sí mismos como nuestros guardianes, a pesar de que nadie ha votado por ninguno de ellos.

Lo que pretenden estas diez ONG no es protegerte de un ejército de robots asesinos. Esta es una preocupación genuina (aunque dramáticamente diseñada), pero las propuestas de estas ONG no lo mencionan.

En cambio, están utilizando este miedo, pregonado por primera vez por Soros en junio, para legitimar su plan de tomar el control de las imágenes digitales, el video y el texto para siempre. Esto significará que ellos decidirán qué es real y qué es falso, y eso está bien, porque saben lo que es mejor para todos nosotros. O eso dicen.

Para un hombre dedicado a construir redes de subversión en nombre del altruismo, fue notable escucharlo advertir sobre los peligros del «control autoritario» prometido por el desarrollo de tecnologías de inteligencia artificial.

Soros teme que, sin el control -por parte de personas como él, por supuesto- las elecciones y las democracias puedan ser corrompidas por falsificaciones creadas por «actores maliciosos» que utilizan la IA. Parece que se le escapa que ningún «deepfake» podría ser más dañino para la reputación de Joe Biden y Kamala Harris de lo que sus apariciones reales en televisión han demostrado consistentemente.

En opinión de Soros, la «regulación global» de la IA es necesaria para que sirva a su agenda de «sociedad abierta» y desfavorezca la alternativa: una sociedad sana, estable y tradicional que no sea corrompida por subversivos no elegidos.

El proyecto de estas diez ONG es controlar para siempre lo que se produce en los medios digitales. Esto significa que las únicas imágenes, texto y salida de la IA estarán diseñados para ser buenos para usted. Cualquier pregunta que hagas será respondida de acuerdo con los valores de la «justicia social».

¿Quién ha de decidir lo que es bueno y lo que es justo? Esos serían los ateos abortistas de fronteras abiertas que te desprecian. La Buena Gente, que busca protegerte con su régimen de censura ilustrado.

Soros puede ser detenido

Las críticas a la vasta red de influencia del imperio de la subversión de Soros a menudo se califican de «antisemitas», un insulto que excluye el hecho de que se aprobó una «ley Soros» en Israel para prohibir las actividades de las Fundaciones Soros.

Aprobada en 2017, su objetivo específico era «bloquear las donaciones a organizaciones de izquierda que disfrutan de financiación extranjera».

El proyecto de ley del gobierno israelí tenía la intención de impedir que ONG como las de Soros construyeran una estructura globalista paralela al poder estatal, a través del control de los medios de comunicación y el patrocinio de grupos activistas de la «sociedad civil». Prohibió todas las donaciones a Open Society Foundations y otras similares por esta razón, diciendo que «cualquier persona que done a organizaciones que actúen en contra de Israel no podrá donar a ninguna organización o asociación sin fines de lucro en Israel».

Medidas similares tomadas en Hungría en 2018 fueron condenadas por grupos europeos de derechos humanos. El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, calificó la legislación como la ley «Stop Soros», ya que fue diseñada para evitar que grupos como Open Society Foundations financien y permitan la inmigración ilegal masiva.

Esto se consideró un desafío directo a la soberanía del gobierno húngaro, cuyas medidas condujeron a la retirada completa de la Fundación Soros de Hungría en mayo de 2018.

Estas iniciativas exitosas ponen de relieve dos factores importantes: que las ONG «progresistas» buscan socavar el poder soberano de los gobiernos considerados antiliberales, y que la ley puede ser utilizada de manera efectiva para detenerlos.

Es vital recordar que ustedes no son impotentes y que estas iniciativas del Nuevo Orden Mundial pueden ser detenidas. Póngase en contacto con sus representantes hoy mismo y hágales saber que no es asunto de multimillonarios no electos con una agenda malvada decidir lo que es bueno para usted hoy, mañana o para siempre.}

Fuente LifeSites