Los obispos católicos polacos condenan la radical resolución de la UE que declara el aborto un «derecho fundamental»

El arzobispo Tadeusz Wojda, presidente de la Conferencia Episcopal Polaca, criticó la «propaganda a favor del aborto» y advirtió de las amenazas que el aborto representa para los no nacidos y la sociedad en respuesta a la resolución de la UE.

El presidente de la Conferencia Episcopal Polaca reprendió la reciente resolución del Parlamento Europeo que exige que el aborto sea declarado un «derecho fundamental» y condenó el aborto como asesinato.

El 11 de abril, el mismo día en que el Parlamento Europeo aprobó su resolución a favor del aborto, la Conferencia Episcopal Polaca (KEP) publicó una declaración del arzobispo Tadeusz Wojda, presidente de la KEP.

«Los niños no nacidos son los más vulnerables e inocentes de todas las personas», escribió Wojda. «El aborto también representa una amenaza para las mujeres y sus seres queridos, así como para la sociedad en su conjunto. Causa serias amenazas a la salud de las mujeres, lo que conduce a un gran sufrimiento a largo plazo de las madres, tanto en el aspecto físico como en el mental y espiritual».

«La propaganda a favor del aborto proclama falsamente que es su libre elección y ley», continuó.

Citando la encíclica Evangelium Vitae del Papa Juan Pablo II de 1995, el arzobispo escribió: «Pero ninguna palabra tiene el poder de cambiar la realidad de las cosas: el aborto procurado es el asesinato deliberado y directo, por cualquier medio que se lleve a cabo, de un ser humano en la fase inicial de su existencia, que se extiende desde la concepción hasta el nacimiento (Evangelium Vitae 58)».

Subrayó que el Magisterio de la Iglesia Católica «siempre ha protegido la vida humana desde la concepción».

Citando de nuevo a San Juan Pablo II, Wojda escribió:

Entre todos los delitos que se pueden cometer contra la vida, el aborto procurado tiene características que lo hacen particularmente grave y deplorable. (…). Pero hoy, en la conciencia de muchas personas, la percepción de su gravedad se ha oscurecido progresivamente. (…) Ante una situación tan grave, es necesario ahora más que nunca tener la valentía de mirar a la verdad a los ojos y llamar a las cosas por su nombre, sin ceder a compromisos convenientes ni a la tentación del autoengaño (Evangelium vitae, 58).

Wojda señaló que la Constitución polaca protege la vida de los no nacidos.

«La Constitución polaca otorga a todas las personas la protección jurídica de la vida (artículo 38) y también protege la maternidad, la paternidad y la familia (art. 18)», dijo. «Este es un derecho fundamental que nadie debería violar».

«Pido a todas las personas de buena voluntad que cuiden de la vida de los niños por nacer y de sus madres, que se opongan a una cultura de exclusión que priva a las personas más vulnerables y débiles del derecho básico: el derecho a la vida», concluyó el arzobispo Wojda.

El 11 de abril, el Parlamento Europeo votó a favor de una resolución que pide la inclusión del aborto en la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE.

La resolución pide una despenalización completa del aborto, citando las directrices de la OMS sobre el aborto de 2022, y que países como Polonia y Malta deroguen las leyes que restringen o prohíben el asesinato de bebés no nacidos.

El texto también ataca a los médicos y enfermeras que se niegan a participar en un aborto debido a objeciones de conciencia, afirmando falsamente que retrasar los abortos podría perjudicar a las mujeres. El aborto directo siempre es gravemente inmoral y nunca es necesario ni está éticamente justificado para salvar la vida de una madre o proteger su salud.

El documento exige que «los métodos y procedimientos de aborto sean una parte obligatoria del plan de estudios para médicos y estudiantes de medicina» y que los Estados miembros garanticen «una educación sexual y de relaciones integral y apropiada para la edad».

La resolución no es vinculante, y para cambiar la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE para incluir el «derecho» al aborto, se necesitaría un acuerdo unánime entre los 27 Estados miembros.

Fuente LifeSites