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En el trabajo, dichas conductas pueden verse como interrupciones frecuentes en reuniones, falta de reconocimiento y sensación de que sus intervenciones y funciones no son validadas por los otros.

Los avances en inclusión y equidad de género en las organizaciones se ven opacados por prácticas culturales que persisten al interior de las organizaciones, que siguen dificultando el crecimiento de las mujeres en su trabajo.

Así lo muestra el estudio ‘Radiografía de las Mujeres en el Trabajo’, elaborado por Buk, que da luces sobre los aspectos en los que persiste la brecha entre homres y mujeres, sobre todo a nivel salarial. De acuerdo con los datos de la plataforma, que incluye a más de 1.6 millones de colaboradores en Colombia, Chile y Perú, las mujeres ganan un 26% menos que los hombres; para el caso de Colombia esta diferencia es del 18%.

Sin embargo, tampoco se animan a negociar su salario, pues generalmente reciben respuestas negativas: el 63% de las mujeres no se siente conforme con la respuesta cuando solicitan un aumento de sueldo; solo el 77% consigue mejorar sus condiciones salariales, mientras que este porcentaje asciende a 88% para el caso de los hombres.

En otras prácticas dentro de la cultura organizacional que impactan negativamente a las mujeres en el trabajo, el informe encontró que casi 1 de cada 10 mujeres afirma experimentar migroagresiones en su empresa; esto se entiende como acciones, conductas o comentarios que reflejan hostilidad o menosprecio, según el WEF.

En el trabajo, dichas conductas pueden verse como interrupciones frecuentes en reuniones, falta de reconocimiento y sensación de que sus intervenciones y funciones no son validadas por los otros.

El 45% de las mujeres en Colombia afirma querer cambiar de trabajo, aunque no estén buscando activamente.

Fuente Forbes


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