Familia de Manitoba demanda a AstraZeneca después de que su hijo de 21 años sufriera un derrame cerebral después de la vacuna COVID

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Una familia canadiense está presentando una demanda contra AstraZeneca dos años después de que su hijo anteriormente sano sufriera un derrame cerebral post-COVID. 

El 16 de marzo, Marina y Perry Reimer de Steinbach, Manitoba, presentaron una declaración de demanda ante el Tribunal de Manitoba de King’s Bench, alegando que su hijo de 23 años, Jackson Troy Reimer, sufrió un derrame cerebral hemorrágico en marzo de 2021 después de recibir la vacuna COVID-19 de AstraZeneca. El reclamo reveló que Reimer sigue siendo un inválido, dependiente del cuidado de sus padres.  

«Para Jackson, la vacuna de AstraZeneca y / o Covishield no fue la mejor vacuna», dice la afirmación, y agrega que «otras vacunas eran más seguras y efectivas». 

La familia Reimer también ha presentado una demanda contra Vail Resorts, Verity Pharmaceuticals Inc., la Autoridad de Salud Costera de Vancouver y el Fiscal General de Canadá, afirmando que cada uno de los acusados no informó a Reimer de los riesgos involucrados con la vacuna de AstraZeneca, privándolo así de su derecho al consentimiento informado. 

La familia de Reimer dijo que su hijo había estado «en excelente estado de salud» antes del pinchazo. Solo seis días después de recibir la vacuna COVID de AstraZeneca, comenzó a experimentar dolores de cabeza, pérdida de visión y mareos. Fue admitido en el Hospital General de Vancouver, donde una tomografía computarizada reveló que sufría un derrame cerebral hemorrágico. 

Según los documentos de la reclamación, Reimer requirió dos infusiones de plaquetas seguidas de una craneotomía para detener su hemorragia cerebral. Ahora, más de dos años después de su accidente cerebrovascular, es legalmente ciego, sufre de convulsiones y deterioro de la función intestinal, y no puede vivir solo. El joven de 23 años también sufre de pérdida de memoria y deterioro mental, incluidos trastornos obsesivo-compulsivos, todos los cuales los padres de Reimer atribuyen a su recepción de la inyección de Astra Zeneca.

«Los demandantes afirman que el derrame cerebral, la craneotomía y todos los síntomas derivados de ellos fueron causados como resultado de que Jackson recibió la vacuna AstraZeneca o Covishield», se lee en el documento judicial.  

Reimer se vio obligado a tomar la vacuna de AstraZeneca después de que la estación de esquí Whistler Blackcomb en Columbia Británica, propiedad de Vail Resorts, le enviara un correo electrónico a él y a otros empleados, diciéndoles que se vacunaran lo antes posible y recomendándoles que recibieran la vacuna de AstraZeneca.  

Ese mismo día, el primer ministro Justin Trudeau emitió un comunicado afirmando que los disparos emitidos por AstraZeneca eran «seguros y efectivos». Instó a los canadienses a recibir inyecciones lo más rápido posible, a pesar de que varios países ya habían prohibido las inyecciones de la compañía por su presunto vínculo con coágulos de sangre.    

«Health Canada y nuestros expertos han pasado mucho tiempo asegurándose de que cada vacuna aprobada en Canadá sea segura y efectiva», dijo Trudeau en ese momento.

«La mejor vacuna para tomar es la primera que se le ofrece. Así es como superamos esto lo más rápido posible y de la manera más segura posible».

A pesar de esta declaración confiada, Canadá prohibió las vacunas de AstraZeneca para personas menores de 55 años apenas dos semanas después, debido a la evidencia emergente de que causan coágulos de sangre. El 29 de marzo, Health Canada emitió una declaración del Consejo de Directores Médicos de Salud diciendo que estaban tomando «medidas de precaución».

«Como directores médicos de salud, estamos actuando decisivamente con nuestra posición unificada para detener el uso de la vacuna de AstraZeneca en Canadá en menores de 55 años en este momento», escribieron en su declaración. «Estamos tomando esta medida de precaución mientras Health Canada, como regulador, completa su análisis actualizado de riesgo / beneficio basado en datos emergentes». 

Como se informó anteriormente por LifeSiteNews, los pinchazos del gigante farmacéutico ya habían estado bajo una intensa atención internacional debido a las preocupaciones sobre su seguridad y supuesta eficacia, con varios países europeos suspendiendo su uso después de numerosos informes de coagulación de la sangre.  

Del mismo modo, los hallazgos de un equipo de investigación noruego con respecto a la vacuna de AstraZeneca se centraron en el caso de tres trabajadores de la salud, todos menores de 50 años, que experimentaron trombosis severa después de recibir la inyección, uno de ellos murió de una hemorragia cerebral

La Agencia Europea de Medicamentos también había agregado una advertencia de coágulo de sangre a la vacuna COVID de AstraZeneca a mediados de marzo de 2021, después de los informes de que 38 personas que habían recibido la inyección desarrollaron coágulos de sangre. La misma agencia también aprobó el uso de la inyección.  

El gobierno de Estados Unidos también había advertido previamente contra la inyección de AstraZeneca.  

Según los propios datos del gobierno canadiense, hasta el 3 de marzo de 2023 ha habido 4.418 efectos adversos reportados por aquellos que han tomado al menos una o más inyecciones de AstraZeneca, 962 de ellos «graves». 

Fuente LifeSites

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